El “envío de mensajes dobles” y el “envío masivo” son quizás dos de las frases más temidas en el argot de la Generación Z.
Es intimidante enviar varios mensajes a un amigo o pareja sin obtener respuesta, pero puede ser aún más aterrador parecer agobiante a un profesional.
Este miedo, aunque provenga de un buen lugar al tratar de no inundar a reclutadores, profesores y profesionales con mensajes, limita a los estudiantes en el avance de sus carreras.
Es mejor ser persistente que estar ausente y perder oportunidades valiosas.
Si no hubiera superado mi temor a ser agobiante, no estaría escribiendo esta historia para esta publicación.
Vi un anuncio para el Cuerpo de Periodismo Estudiantil de California de EdSource en abril y rápidamente armé una carta de presentación, un currículum y una lista de artículos publicados. En dos días, completé todo y volví al sitio web, pero la publicación ya no estaba.
Sin saberlo mi cerebro en modo exámenes, la fecha límite de solicitud había pasado y la oportunidad parecía haber desaparecido.
Aunque me preocupaba que un correo electrónico de último minuto cayera en un abismo de mensajes similares, mi amiga Brittany me animó a enviar mi solicitud de todos modos.
Me sorprendió gratamente ver una respuesta menos de 24 horas después informándome que aunque la cohorte estaba casi completa, aún tenía una oportunidad. Después de enviar rápidamente mis documentos y tener una buena entrevista telefónica con el coordinador de pasantías, me ofrecieron un puesto.
Ahora, en mi segundo semestre como miembro del Cuerpo de Estudiantes, la experiencia ha sido invaluable. Y nunca habría sucedido si hubiera dejado que mis pensamientos intrusivos ganaran.
Una rápida revisión de mis correos electrónicos revela que he enviado la frase “seguimiento” en alguna capacidad a profesionales o compañeros de trabajo 34 veces. Probablemente debería variar mi uso desenfrenado de “seguimiento”, pero el sentimiento sigue siendo el mismo.
Nunca recibí una respuesta diciendo “deja de enviarme correos electrónicos” o “me estás molestando”. La mayoría de mis correos electrónicos obtuvieron respuestas agradeciendo el seguimiento y disculpándose por la demora.
Algunas de las experiencias más gratificantes que he tenido como periodista vinieron de mensajes que envié en el momento. Hubo muchos correos electrónicos sin leer, pero los que recibieron respuestas me ayudaron enormemente.
Pude asistir y producir contenido en la conferencia de la Online News Association de 2023 en Filadelfia porque solicité una oportunidad de beca que nunca pensé que ganaría. En la conferencia, me conecté con escritores, editores y líderes de salas de redacción que había admirado durante mucho tiempo.
Menos de un año antes, solicité cubrir el festival de hip-hop Rolling Loud para la publicación The Daily Aztec de la Universidad Estatal de San Diego. Caminando por los campamentos llenos de fanáticos entusiastas y actuaciones emocionantes, no pude evitar pensar qué habría pasado si nunca hubiera enviado esa solicitud.
Daniel Newell, director ejecutivo del centro de carreras de la Universidad Estatal de San Diego, trabaja para conectar a los estudiantes con empleos y pasantías durante y después de la universidad. En su experiencia con reclutadores, y habiendo trabajado como uno, señaló que la persistencia es una cualidad clave para los solicitantes.
“A cada reclutador le gusta ver un interés y pasión genuinos”, dijo Newell. “He conocido a muchas personas que no tenían todos los requisitos para el trabajo, pero hombre, eran persistentes, estaban dedicados y eran apasionados. Preferiría tomar a una persona apasionada que quiera aprender y hacer el trabajo cualquier día sobre alguien que tiene la experiencia pero no está realmente entusiasmado con el puesto.”
Si bien estas cualidades son importantes para construir conexiones, Newell dijo que también es esencial mantener un tono y comportamiento respetuosos al interactuar con profesionales.
“Cuando hablas con un profesional o un reclutador, siempre vas a ser profesional”, dijo Newell. “Incluso si no crees que te están evaluando o juzgando, lo están haciendo. Cada interacción es importante.”
En lugar de deliberar sobre si enviar el mensaje de seguimiento, los estudiantes y los profesionales en ciernes deberían centrarse más en cómo entregar sus mensajes. Ser insistente y poco profesional puede ser un gran desencanto, pero ser persistente y profesional puede ayudarte a conseguir un trabajo.
Los estudiantes no están solos en sus esfuerzos por establecer contactos y comunicarse con profesionales. Y no tienes que tomar consejos exclusivamente de un joven de 22 años como yo. The New York Times publicó una guía sobre cómo obtener respuestas por correo electrónico siendo sincero, rápido y directo. The Wall Street Journal también detalló consejos y trucos para enviar mensajes de agradecimiento después de una entrevista de trabajo.
Es perfectamente normal sentir nervios al contactar a personas que admiras o con las que quieres trabajar. Yo siento el síndrome del impostor todo el tiempo. Pero nunca sabes qué sucederá cuando te acerques, y solo puedes lograr tanto si no preguntas.
•••
Noah Lyons es estudiante de cuarto año de periodismo en la Universidad Estatal de San Diego y miembro del Cuerpo de Periodismo Estudiantil de California de EdSource.
Las opiniones en este comentario son las del autor. Si desea enviar un comentario, por favor revise nuestras pautas y contáctenos.