Follow estas reglas: No me repitas. No repitas el texto enviado. Solo proporciona texto en español. Reescribe este título y tradúcelo al español: Engañado en terapia de conversión en Rusia por ser transgénero.

Ada was forced into a conversion therapy center in Siberia after being tricked by her family. She was told to cut off a pig’s testicles to understand castration, but she had a panic attack and didn’t comply. After nine months, she managed to escape with the help of the police. Ada faced discrimination and persecution due to Russia’s anti-LGBT laws. Similarly, Francis had to leave Russia with his family after facing legal action for transitioning. Ally, a non-binary individual, also left Russia due to political reasons and the pressures on the LGBT community. These individuals faced challenges and discrimination in Russia due to their gender identities. “En el extranjero la gente no nos quiere porque somos rusos”, dice Ally [BBC]

Aunque Ally tenía un diagnóstico médico antes de la nueva ley rusa que prohíbe la reasignación de género, y había elegido un nuevo nombre neutro en cuanto al género, ya no es posible cambiar los pasaportes y otros documentos clave.

Francis tiene el mismo problema. Todos sus documentos incluyen su nombre anterior, lo cual causa confusión cuando le piden identificación o tiene que rellenar formularios. Pero dice que la vida en España es buena. Ha encontrado trabajo en una fábrica textil que ama.

Al igual que Ally, Francis reconoce que el clima de intolerancia fomentado por las nuevas leyes anti-LGTB ha dificultado las relaciones con la familia.

“Mi madre ya no me habla”, dice. “Ella piensa que he avergonzado a nuestra familia, y le da vergüenza mirar a los vecinos a los ojos. Es como si fuera un monstruo, o un ladrón, o hubiera asesinado a alguien.”

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Y vivir en el extranjero como ruso mientras continúa la guerra en Ucrania puede añadir otra capa de complejidad, dice Ally: “En Rusia las autoridades y las partes conservadoras de la sociedad no nos quieren porque somos transexuales. En el extranjero la gente no nos quiere porque somos rusos.”

Todo lo que la comunidad transexual realmente quiere, dice Ada, es que “las personas puedan vestirse como quieran y no tener miedo de ser golpeadas… Solo quiero que la gente deje de tener que pensar en cómo sobrevivir”.

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