
HOY
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Denunciarían
- La líder campesina Francisca Ramírez indicó que si la Policía no investiga lo sucedido con su hijo denunciaría el hecho ante algún organismo de los derechos humanos.
- “Denunciaríamos a los derechos humanos porque vemos que realmente no quieren (la Policía) investigar la situación… Vemos que lo que hay es una persecución en contra de nosotros y la verdad esto es demasiado”, dijo Ramírez.
- El accidente se dio un día después de la marcha de los campesinos contra el Canal Interoceánico.
Alrededor de las 4:15 de la tarde del pasado domingo Maynor López, hijo de la líder campesina Francisca Ramírez, sufrió un accidente en motocicleta cuando pasó llevándose un alambre de púas que estaba amarrado entre dos postes.
Pese a que López solo sufrió golpes, Ramírez culpa al Estado de Nicaragua y a la Policía de lo que pueda ocurrirle a ella y a su familia porque considera que el accidente que sufrió su hijo fue provocado.
Aunque Ramírez llamó a la Policía desde el mismo domingo para que se presentaran a ver lo ocurrido, las autoridades nunca llegaron.
“Ya son las 2:00 de la tarde (de ayer) y la Policía de la (Nueva) Guinea no se presentó, entonces estoy esperando a un abogado para ir a levantar la moto del lugar y poder ir a poner la denuncia en la estación porque la Policía me prometió venir y no vino”, expresó Ramírez.
Añadió que asegura que el accidente ocurrido fue provocado porque el alambre de púas fue amarrado entre dos postes que estaban en los extremos de un camino que comunica a la colonia La Fonseca y la comarca San Isidro.
“Cruzaron un alambre de púas en una carretera pública… en una vuelta y él (su hijo) salió por esa vuelta, entonces él se estrelló en el alambre. La moto se arrastró unos 10 metros y gracias a Dios se logró quebrar uno de los postes donde estaba agarrado el alambre y eso ayudó para que no fuera peor el accidente”, expresó Ramírez.
Según Francisca, les preocupa el hecho ya que no es primera vez que les pasa algo cerca de ese lugar donde tuvo el accidente su hijo.
“Ya estamos bien preocupados porque el 12 de octubre del 2016, casi en el mismo lugar, le salieron (a su hijo) cuatro encapuchados y los chavalos iban vestidos de militares y les dijimos a la Policía y no quiso ni seguirnos, ni investigar ni nada”, comentó Ramírez.
Señaló que actualmente se siente amenazada, “yo siento que es como una represalia en contra mía porque soy una ciudadana… y la Policía tenía que venir a ver este caso porque mi hijo está bien golpeado”.