Los niños pasan un promedio de casi 45 horas a la semana sumergidos en las pantallas de televisión, celulares, computadora y video juegos. Si observamos detenidamente este dato veremos que ese es más tiempo del que muchos padres nos pasamos en el trabajo o con nuestros hijos.
Limitar el tiempo que nuestros hijos pasan frente a la televisión y otras pantallas puede ayudar a prevenir y tratar los problemas de obesidad y sobrepeso. Aunque la televisión y otras pantallas pueden ser entretenidas e incluso educativas, demasiado tiempo en ellas es contraproducente.
Encontrar un balance ayudará a tu hijo a usar más su imaginación para crear juegos, dedicar más tiempo a sus tareas, leer, pintar y hacer más actividades físicas que le ayuden en su desarrollo y entretenimiento.
Especialmente durante la hora de las comidas dedica este tiempo para conectarte con tus hijos, preguntarles sobre sus planes para el día o como les fue en la escuela. Trata de que las comidas sean un momento agradable y educativo, evita hablar de temas estresantes, regañarlos o pelear con tu pareja.
Puedes usar este tiempo para hablar de planes familiares interesantes, contar anécdotas divertidas y enseñarle a tus hijos sobre la importancia de la buena alimentación y los hábitos saludables. Asegúrate de apagar la televisión y otros aparatos antes de empezar a comer e invita a tus hijos a hablar durante la comida, exponer sus puntos de vista y comentar sobre la comida.
Investigaciones han demostrado que las familias que comen juntas y no permiten interrupciones tienden a ser muy unidas y generar hábitos de vida positivos que sus hijos practican a lo largo de sus vidas, detalla Discory Mujer.
¡Dale a tus hijos el mejor regalo: tu tiempo y atención!